En el año 1974 fue vendida a Rumasa. Entonces fue dirigida por Don Antonio y Don Alberto, éste era cuñado de José María Ruíz Mateos que dirigía Rumasa y entonces cambió la vida de los empleados porque abundaba el trabajo y los trabajadores tenían mejor calidad de vida. Los ganaderos pasaron a otros empleos porque vendieron los animales, las dehesas las explotaban ellos, las de las sierra, con repoblación. Entonces las dehesas de las ciervas no tenían acceso para poder transitar con coche, solo en verano y tiempo del descorche que hacían carriles para poder retirar el corcho.
Y también los términos de las dehesas fueron alambradas con alambrada cinegéticas. A los guardas de las dehesas de las siervas les hicieron casas dobles para que salieran en pareja, por ejemplo, las dehesas Cotilla, Juan de Sevilla, Nava Matrera, Hoyuelo Alto y Corchadillo y los que vivían en el pueblo salían por las noches de servicio, acompañado por un conductor y también le dieron la oportunidad de sacarse el carnet de conducir a los empleados como guardas jurado y a los que tenían hijos en edad de ir al colegio pues le ponían medio de transporte (que vivían en el campo). Compraron maquinaria agrícola y vehículos todo terreno.
Esto es un relato de Ana Jiménez, una de las alumnas de las clase de adultos; en otra ocasión nos dará mas detalles de sus vivencias.
PEPI LAGUNA
Podemos ir viendo algo más de la historia de la finca de la Almoraima en el siguiente enlace, en el que aparece bien documentada la evolución que ha sufrido una de los latifundios más prósperos de nuestro país.
También seguiremos realizando aportaciones personales de las vivencias de alumn@s del centro, desde una perspectiva más humana.
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